domingo, 13 de febrero de 2011

Crítica de 'Rabbit hole'

La muerte en accidente de su hijo de cuatro años arroja la vida de un matrimonio al abismo. La madre, Becca (Nicole Kidman), intenta asumir la pérdida enfrentándose con Jason, el adolescente causante del atropello, que a su vez también está sufriendo las consecuencias. Mientras, el padre, Howie (Aaron Eckhart), sigue aferrado al modo de vida de cuando disfrutaban de su hijo, lo que le aleja más todavía de Becca.

Esta es una gran muestra de que no hace un gran presupuesto para lograr una gran película. No es que sea una obra maestra ni muestre nada que no hayamos visto, pero el sólido guión de David Lindsay-Abaire y la solvente dirección de John Cameron Mitchell adentran al espectador en este drama intimista y que logra momentos de gran emoción.


Esto se consigue gracias a las interpretaciones de los miembros de su reparto, destacando a unos fabulosos Nicole Kidman y Aaron Eckhart, sin olvidarnos de los secundarios Dianne West, Miles Teller, Tammy Blanchard o Sandra Oh.


También ayudan unos aspectos técnicos nada destacables, pero sí acertados, como son la banda sonora, el vestuario, la fotografía...


La mejor escena es la discusión sobre el vídeo entre Becca y Howie y en la que Kidman y Eckhart están sencillamente espectaculares.


1 comentario:

Unknown dijo...

Una película de lo más interesante, con un sólido guión y muy buenas interpretaciones. De haber sido de un estudio más grande, seguro que sacaba unas cuantas nominaciones además de la de Nicole Kidman.